Descripción
Tras “Las viudas tenaces”, el divertido cuento que abre este libro, protagonizado por un poeta melancólico y solterón, el lector irá descubriendo, casi siempre con un amago de sonrisa en la boca, a una fauna dispar de poetas extravagantes, novelistas en dique seco o cuentistas perplejos, habitantes todos de un extraño universo provinciano. Encargos literarios, curiosas tertulias de café, chocarreros premios literarios o disparatadas entrevistas radiofónicas. Metaliteratura en estado puro. Una vez más la ironía, aliada con el estilo envolvente y arrollador de Ignacio Sanz, nos abre las puertas de un mundo rico en matices y nos invita a una fiesta en su plenitud narrativa.